¿Por qué seguir votando al “menos malo”?
Que el pueblo trabajador DECIDA todo para…
…DERROTAR EL AJUSTE
La dirigencia política de siempre, vinculada con sectores del poder económico, ya decidió ajustar y seguir ajustando a todo el pueblo trabajador. Con el argumento de que se deben “hacer esfuerzos”, pretende imponerle a la gran mayoría de la población un salario o jubilación que no alcanza para llegar a fin de mes, o a resignarse a ser despedidxs o suspendidxs hasta que “el país vuelva a crecer”. ¿No debería ser al revés? ¿No deberían ser estas grandes mayorías las que les impongan el ajuste a los grupos económicos que vienen ganando desde hace décadas? ¿Quién debe hacer el “esfuerzo” de cargar con el ajuste? ¿Los bancos o los/as jubilados/as? ¿Los grandes sojeros o los/as que viven de su salario? ¿Los grandes dueños de nuestras tierras o quienes la trabajan? ¿Las grandes cadenas de supermercados o quienes les alcanza apenas para comprarse una canasta básica de alimentos? ¿Los que especulan todos los días con la bicicleta financiera o los cientos de miles de jóvenes precarizados? ¿No deberíamos ajustarlos a ellos, los que vienen beneficiándose de la riqueza que generan a diario los trabajadores y trabajadoras de este país?
Para ajustar a los de arriba, que el pueblo trabajador decida todo.
…Y CONSTRUIR UN PROYECTO DE PAÍS ALTERNATIVO
La falta de cambios de fondo durante el kirchnerismo fue llevando a un paulatino deterioro en las condiciones de vida de los/as trabajadores/as y de los sectores populares que habían mejorado durante los primeros años de gobierno. Durante todo ese tiempo los grandes grupos económicos han ganado fortunas y son esos mismos grupos los que hoy le piden a Macri el ajuste que está llevando adelante. Lo que pone en evidencia que sin tocar los intereses de esos sectores no hay proyecto alternativo de país ni soluciones a los problemas estructurales del pueblo trabajador. Por eso decimos que hay que “ajustar a los de arriba”. Para que la riqueza no se siga concentrando en pocas manos mientras el salario y la jubilación no alcanza, los despidos y suspensiones se multiplican y la pobreza no para de crecer. Pero la dirigencia política no plantea ese ajuste que nos permitiría construir un proyecto alternativo de país orientado a priorizar las necesidades populares y no las ganancias empresarias. Por eso mienten en campaña prometiendo soluciones que luego no van a cumplir. Por eso hacen campaña denunciándose unos a otros para poder diferenciarse, aunque seguramente al poco tiempo se pueda llegar a ver juntos a los que antes se denunciaban (¿No fue Carrió la que denunció a Macri de corrupto hace algunos años? ¿Y Stolbizer no hizo lo mismo con Massa?). Por eso cuando llegan al Congreso y a la Legislatura, “opositores” y “oficialistas” terminan pactando los votos. Y por eso también es que esta dirigencia se vuelve cada vez menos creíble. Sin embargo, nos siguen diciendo que hay que votar al “menos malo”. Hace años que esta dirigencia política busca votos con el argumento del “menos malo”. ¿Se puede construir un proyecto de país alternativo votando siempre “al menos malo”? ¿No es hora de que empecemos a construir esa alternativa?. Una alternativa que ajuste a los de arriba. Una alternativa que se vaya construyendo desde abajo, juntando fuerzas desde allí, como lo viene mostrando la rebelión de las mujeres que se autoconvocan para luchar contra la opresión patriarcal.
Para ajustar a los de arriba, que el pueblo trabajador decida todo.