El gobierno sigue intentando ajustarnos el salario con el 15%, muy por debajo de la inflación, mientras le garantiza enormes ganancias a las LEBAC (arriba del 40%) y los bancos están ganando 77% más que el año pasado. Nos dicen que no hay plata. Es evidente que plata hay, pero como pasa con los tarifazos, el ataque al salario docente es parte de la política del gobierno de “achicar el gasto” para pagar una deuda que el gobierno aumento vertiginosamente para garantizar los dólares que se llevan afuera los especuladores de las LEBAC, las multinacionales, los bancos, los sojeros y los grandes grupos económicos. Lo que se llevan afuera es el salario que nos falta, es el producto de nuestro trabajo y nuestro esfuerzo cotidiano.

Las negociaciones con el FMI son para profundizar el ajuste del gobierno, para meternos todavía más la mano en el bolsillo y seguir pagando esa deuda que nunca pedimos como pueblo, que ya pagamos varias veces y que se han llevado afuera sistemáticamente los grandes grupos económicos. Este gobierno nos endeudó en más de 100.000 millones de dólares, y 80.000 ya se los llevaron afuera. Sólo en la última corrida cambiaria, el gobierno les entregó 7.000 millones de dólares. ¡Y vienen por más! No se puede esperar a las elecciones de 2019, como plantea la oposición del Congreso: TENEMOS QUE MOVILIZARNOS Y PARAR ESTO AHORA y, para eso, necesitamos la máxima unidad para echar al FMI de la Argentina.

La única forma de derrotar los tarifazos y ganar paritarias en las que no perdamos contra la inflación, es echando al FMI y derrotando el ajuste del gobierno, que paga cada vez menos salario y más deuda, pero también planteando la necesidad de un proyecto alternativo que comienza desconociendo esa deuda y dejando de pagarla. Y, partiendo de ahí, discutir un proyecto donde se prioricen las necesidades populares y no las ganancias empresarias. Por ejemplo, la necesidad de pelear por la propiedad pública de las empresas de servicios (luz, gas, agua, transporte, etc.) administrada por trabajadores y usuarios, así como también de la banca y el comercio exterior para evitar que se sigan llevando afuera el producto de nuestro trabajo.

¿Cómo hacemos para parar esto? La dirigencia de la gran mayoría de los sindicatos es un obstáculo inmenso para que las y los trabajadores podamos unir nuestras luchas en un gran paro nacional y un plan de lucha para que se vaya el FMI de la Argentina y derrotar el ajuste del gobierno. Pero lo que no viene desde arriba tenemos que construirlo desde abajo. Necesitamos discutir en cada escuela con nuestras compañeras y compañeros, hacer asambleas por escuela y por distrito para articular e ir juntando desde abajo la fuerza que necesitamos para dar, junto al conjunto de las y los trabajadores, la pelea de fondo para derrotar el ajuste y para construir un proyecto alternativo de país.

Docentes de AyL
23 de mayo de 2018