*Por Fernando Vilardo (Legislador de la Ciudad de Buenos Aires)

El pasado jueves 16 se discutieron en la Legislatura dos proyectos diferentes para conformar una comisión investigadora por los hechos ocurridos en Time Warp. Los proyectos eran diametralmente opuestos. Uno fue el de Gustavo Vera (Vaticano), que proponía conformar una comisión únicamente de legisladores respetando la proporcionalidad de la cámara, es decir, integrada mayoritariamente por el PRO, secundada por el PJ, seguida por las mismas fuerzas que integran la Alianza Cambiemos, y todo esto “bendecido” por Bergoglio (a través del mismo Vera). Proyecto votado por Ramal. El otro era el nuestro, que apuntaba a investigar al gobierno del PRO, a la Legislatura y a las fuerzas de seguridad con una comisión de personalidades independientes de los tres poderes, encabezada –proponíamos– por Nora Cortiñas, Perez Esquivel, entre otros, y familiares de las víctimas y jóvenes sobrevivientes.

Creemos que a partir de allí se abría una discusión totalmente legítima. Nosotros sostenemos que una comisión integrada por legisladores, con el PRO, el PJ y Bergoglio a la cabeza, embellece las instituciones de la clase dominante y termina siendo un completo engaño para la población ya que despierta expectativas en que el oficialismo se investigará así mismo y que el PJ lo ayudará a hacerlo cuando en realidad, por lo que viene sucediendo no sólo en la ciudad sino en el país, están acordando en las principales políticas impulsadas por el PRO (el acuerdo con los Buitres a nivel nacional; la venta de terrenos públicos de Plaza Houssay y Parque Thays junto a la creación de la Agencia de Bienes en la Ciudad). Por el contrario, nosotros planteamos que solo una comisión independiente de los tres poderes podría llegar a investigar las responsabilidades políticas de esta masacre, mucho más cuando lo que no existe ahora, como sí había en los momentos en que se discutía la masacre de Cromagnón, es la presión social y eventualmente el control para que se investiguen estos hechos.

Pero si bien la discusión es legítima, el twit de Ramal a las horas de terminada la sesión (“Legislador de Zamora se abstuvo en votación de comisión investigadora por Time Warp. AyL funcional al PRO”) impresiona por la rapidez con la que el PO encuentra espacio para pretender conseguir votos (¡a un año de las elecciones!) en su permanente carrera electoral de la que nunca se baja. No sorprende. El PO traslada sus métodos sectarios y carentes de seriedad con los que debate en el FIT donde todo es denunciarse, descalificarse e imputarse con mentiras para sacarle un militante o un voto a sus aliados, en vez de plantear un debate político con AyL que entendemos sería legítimo si dejaran de lado el método de la mentira y la chicana. Pero obviamente no es lo que le interesa al PO ya lanzado en una carrera electoral que parece sin freno.

Este tipo de cosas muestra claramente la necesidad de construir una izquierda alternativa. Como lo planteamos en varias oportunidades: el Frente de Izquierda es un acuerdo exclusivamente electoral, el único objetivo que tiene es cosechar votos, y durará hasta que las fuerzas que lo integran les convenga permanecer allí. Eso no tiene nada que ver con la “unidad de la izquierda” que tanto se habla. Entre elección y elección lo único que se ve son denuncias, chicanas y métodos sectarios, ni más ni menos que lo que muestra este twit.