DESPEDIDA A EDUARDO MARTEDÍ
*Por Luis Zamora
Con vos se va un revolucionario. Hermosa palabra reservada para pocos aunque la usen muchos. Revolucionario porque dedicaste gran parte de tus días y esfuerzos, gran parte de tu aguda inteligencia y tu fina cultura, tu coraje sin límites y tu compromiso incluso físico a pelear contra la barbarie del capitalismo y la construcción de un mundo nuevo, democrático, solidario, socialista. Revolucionario porque enfrentaste a los dogmáticos, a los fundamentalistas, a los soldados disciplinados. Frente a los escépticos, los frustrados, los resentidos pusiste talento, convicción y humor. Tuviste tus defectos que diluías en tu media sonrisa de varón seductor. Tuviste paciencia y comprensión para disimular los míos.
A Eduardo: compañero, amigo entrañable, tierno y querido, en medio de turbulencias y desacuerdos constantes y un cariño profundo me enorgullece pensar que alguien como vos me haya buscado para seguir explorando juntos nuevos caminos de libertad. Te fuiste pero en Autodeterminación y Libertad queda mucho de vos.